El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, mantuvo una extensa reunión de cuatro horas con una delegación de funcionarios estadounidenses, liderada por el embajador Ken Salazar y Amos J. Hochstein, coordinador presidencial especial para la infraestructura global y seguridad energética.
Este encuentro tuvo lugar poco después de la conferencia matutina presidencial del lunes y se prolongó hasta la tarde.
Desde sus redes sociales, el mandatario mexicano destacó la relevancia de esta reunión en Palacio Nacional, calificándola como «una larga e interesante conversación» con Amos J. Hochstein.
López Obrador enfatizó la importancia de fortalecer las relaciones económicas y comerciales entre ambos países y trabajar en la colocación de nuevas inversiones y la generación de empleos en conjunto.
En la conferencia matutina, el presidente anunció que durante el encuentro se abordarían temas fundamentales de la agenda bilateral, como la migración y la lucha contra el tráfico de fentanilo.
Esta reunión representa un paso significativo en la colaboración entre México y Estados Unidos en cuestiones clave de infraestructura y energía, así como en la búsqueda de soluciones compartidas para desafíos regionales.