El 11 de diciembre de 2024, el Instituto Matías Romero (IMR) conmemoró su 50 aniversario, consolidándose como un referente clave en la formación de diplomáticos y en la política exterior de México. En un acto presidido por el canciller Juan Ramón de la Fuente, el rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, y otros destacados funcionarios, se reconoció la trayectoria del instituto y se trazaron nuevas metas para su futuro.
El canciller de la República destacó que, en tiempos de retos globales, México debe desplegar «la mejor diplomacia consular», especialmente en lo que respecta a la protección de los connacionales en Estados Unidos. En su discurso, subrayó que el país debe estar preparado para fortalecer los mecanismos de apoyo y asistencia a los migrantes mexicanos, reflejando el compromiso de su gobierno con la defensa de los derechos de los ciudadanos en el exterior.
En el marco de esta ceremonia, también se firmó un convenio de colaboración entre la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), para impulsar proyectos de investigación en materia migratoria. Este acuerdo tiene como objetivo mejorar la atención de los migrantes mexicanos en Estados Unidos y fortalecer la red consular del país. De la Fuente resaltó la importancia de sumar esfuerzos con la comunidad universitaria, señalando que los centros de la UNAM en Estados Unidos, junto con sus egresados, serán aliados clave en este proceso.
Ética y perspectiva de género en la diplomacia mexicana
El canciller hizo hincapié en la ética como uno de los principios fundamentales en la práctica diplomática, citando ejemplos históricos de figuras como Matías Romero Avendaño y Gilberto Bosques Saldívar, quienes encarnaron valores éticos y de servicio público. Asimismo, reafirmó el compromiso de la administración de impulsar una política exterior feminista, que integre la perspectiva de género en todos los programas del IMR, contribuyendo a una diplomacia más inclusiva y representativa.
Mirando al futuro
En su intervención, el director general del IMR, Juan José Bremer, expresó su compromiso por fortalecer el instituto y expandir sus programas de formación. Resaltó la necesidad de adaptar la enseñanza diplomática a los cambios globales y las transformaciones políticas del país, con el objetivo de mantener al IMR como un centro de pensamiento clave en la formulación de la política exterior de México.
Durante la ceremonia, también se entregaron reconocimientos a las familias de importantes figuras de la diplomacia mexicana, como los bisnietos de Matías Romero y los familiares de Gilberto Bosques y María Luisa Manjarrez. Además, se otorgaron distinciones a exdirectores del instituto, en reconocimiento a su contribución al desarrollo de la diplomacia mexicana.
Un compromiso con el futuro de la diplomacia
El rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, subrayó la importancia de la colaboración entre el ámbito académico y la diplomacia. En su mensaje, destacó que la educación superior pública, especialmente en áreas de humanidades y ciencias sociales, es un pilar esencial para garantizar la prosperidad y la justicia global. Reiteró el compromiso de la UNAM con el IMR, consolidando un vínculo que permitirá continuar formando a los futuros diplomáticos de México con un enfoque ético, inclusivo y de rigor académico.
En su discurso final, Rosaura Ruiz Gutiérrez, secretaria designada de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación, destacó la relevancia de la ciencia y las humanidades en las relaciones internacionales, y reafirmó su apoyo a la colaboración interinstitucional para enfrentar los desafíos de la política exterior en un mundo cada vez más interconectado.
El evento culminó con la entrega de reconocimientos a diplomáticos que han sido parte fundamental de la historia del IMR y de la diplomacia mexicana, reafirmando el legado de una institución que continúa jugando un papel esencial en la formación de las nuevas generaciones de diplomáticos mexicanos.